Un trastorno de personalidad es una condición psicológica caracterizada por patrones persistentes e inflexibles de pensamientos, emociones y comportamientos que se desvían de las normas culturales y sociales y que afectan negativamente la vida cotidiana y las relaciones interpersonales de la persona que lo padece.
Los trastornos de personalidad generalmente se desarrollan en la adolescencia o la edad adulta temprana y pueden ser el resultado de una combinación de factores genéticos, biológicos y ambientales.
El tratamiento de los trastornos de personalidad generalmente involucra la terapia psicológica, que puede ayudar a la persona a desarrollar habilidades para manejar los patrones disfuncionales de pensamiento y comportamiento y mejorar sus relaciones interpersonales.
Tipos de trastornos de personalidad
Los trastornos de personalidad se agrupan en diferentes categorías, cada una con características y patrones de comportamiento distintos. Algunos de los más importantes, reconocidos en el Manual Diagnóstico y Estadístico de los Trastornos Mentales (DSM-5) son:
- Trastorno de personalidad borderline (límite): se caracteriza por una inestabilidad emocional intensa, dificultades en las relaciones interpersonales y una imagen distorsionada de sí mismo. Las personas con este trastorno pueden tener cambios de humor rápidos, impulsividad y miedo al abandono.
- Trastorno de personalidad narcisista: se caracteriza por un sentido exagerado de autoimportancia, falta de empatía y necesidad constante de admiración.
- Trastorno de personalidad esquizoide: destaca por el aislamiento social y la dificultad para expresar emociones. El trastorno de personalidad antisocial implica un desprecio por los derechos de los demás, comportamiento impulsivo y falta de remordimiento por las acciones dañinas.
- Trastorno de personalidad obsesivo-compulsivo: se caracteriza por la rigidez, perfeccionismo extremo y la necesidad de controlar todos los aspectos de la vida. Las personas con este trastorno pueden ser inflexibles en sus creencias y rutinas.
- Trastorno de personalidad histriónico: los que lo sufren tienen una búsqueda constante de atención, emociones exageradas y comportamientos teatrales. Las personas con este trastorno pueden ser muy influenciables y preocuparse en exceso por su apariencia física.
Objetivo
El objetivo de la terapia para tratar el trastorno de la personalidad es abordar los patrones disfuncionales y persistentes de pensamientos, emociones y comportamientos y ayudar a la persona a desarrollar una mayor estabilidad emocional, relaciones interpersonales más saludables y una mayor adaptación a diferentes situaciones de la vida.
El diagnóstico y tratamiento de los trastornos de personalidad generalmente son llevados a cabo por profesionales de la salud mental, como psicólogos o psiquiatras, y pueden involucrar terapia psicológica, terapia farmacológica o una combinación de ambas.
En la terapia se trabaja en:
- Autoconocimiento y conciencia: ayudar a la persona a comprender sus patrones de pensamiento y comportamiento disfuncionales.
- Modificación de patrones disfuncionales: trabajar para modificar los patrones de pensamiento, reacciones emocionales y comportamientos problemáticos.
- Enseñar a la persona habilidades de afrontamiento más efectivas para lidiar con el estrés, la ansiedad y las situaciones desafiantes de la vida.
- Ayudar a la persona a desarrollar habilidades de comunicación, empatía y relaciones interpersonales más saludables y trabajar en el fortalecimiento de la capacidad de la persona
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